Ya pasaron 19 año desde aquel 13 de enero del 2001, cuando un terremoto de magnitud 7.7 grados sacudió el territorio salvadoreño, con una duración de 45 segundos, el cual dejó calamidad, tristeza y luto en los afectados por este desastre.

La colonia Las Colinas, en Santa Tecla, fue una de las más afectadas debido a un deslave de tierra que soterró más de un centenar de viviendas. La Cruz Roja Salvadoreña (CRS) montó un aparataje de trabajo en el lugar para atender a las víctimas.

Las labores realizadas por la CRS en la zona de impacto del desastre en Las Colinas fue de búsqueda y rescate de sobrevivientes, recuperación de cadáveres; salud agua y saneamiento, con la instalación de tanques con agua potable; montaje de albergues para los damnificados, entre otras acciones.

Además, se realizó distribución de agua, alimentos y paquetes de limpieza para damnificados de las diferentes zonas del país que fueron afectados por el fuerte sismo.

La CRS, auxiliar de los poderes públicos, en los aspectos humanitarios, trabaja en la actualidad en tres áreas estratégicas, una de ellas es Gestión de Riesgos y Desastres.

En esta área, con apoyo de Cruz Roja Americana y Cruz Roja Suiza, la institución humanitaria realiza acciones de prevención, preparación, respuesta y recuperación ante posibles emergencias y desastres en los municipios de Ciudad Dolores y Sensuntepeque, Cabañas; asimismo, en la zona del Bajo Lempa, Jiquilisco, Usulután.

Comunidades y centros escolares cuentan con planes de respuesta ante desastres actualizados, Sistema de Alerta Temprana, rutas de evacuación, Comisiones Comunales y Municipales de Protección Civil capacitados y equipados, entre otras acciones.