Cruz Roja Salvadoreña impartió el Curso de Evaluación de Daños en Emergencia y Desastres (EDED) con el objetivo de desarrollar habilidades técnicas en los participantes para ser más efectivos a la hora de dar respuesta a una emergencia.

Como parte del ejercicio formativo se realizó una simulación de Evaluación de Daños y Análisis de Necesidades (EDAN) en la comunidad Joya Grande, ubicada en las orillas del lago de Ilopango; considerando el contexto de la Tormenta Tropical IDA la cual azotó a esta comunidad en el 2009.

Durante el ejercicio los participantes hicieron uso de drones para evaluación de daños y tablets para el procesamiento de datos. El objetivo de estos procesos formativos consiste en ser más efectivos en la recolección de datos respecto a daños y a las necesidades de los afectados por algún desastre.

“El objetivo es desarrollar competencias en cada uno de los participantes para ser asertivos a la hora de realizar una evaluación de daños cuando suceda una emergencia”, destacó Diego Gasca, jefe del Centro de Formación de la institución.

En las clases que se impartieron de forma virtuales y presencial se impartieron temáticas como Acceso Seguro, Evaluación de Daños y Análisis de Necesidades, sistemas de alerta, uso de las herramientas tecnológicas, entre otros.

En el taller participaron miembros de la institución, entre ellos, voluntarios de las seccionales de: Santa Lucía, Cojutepeque, Zacatecoluca, Agua Caliente, San Salvador y Santa Tecla.

Maritza Iraheta, jefa nacional de Socorrismo, participó en el taller y destacó que los conocimientos adquiridos serán de utilidad a la hora dar respuesta a emergencias de grandes magnitudes “para nosotros como Cruz Roja tener un dato exacto, real y verídico de qué tipo de ayuda se le puede dar a ese grupo de personas necesitadas”.

Estos equipos especializados son preparados para dar respuesta a las emergencias en coordinación con el Sistema Nacional de Protección Civil bajo el rol auxiliar de los poderes públicos, en aspectos humanitarios.

Este proceso de aprendizaje constó de 30 horas de formación con la metodología del aprendizaje basado en competencias, coordinado a través del Centro de Formación de Cruz Roja Salvadoreña, y fue con apoyo financiero del proyecto Reducción de Riesgos y Desastres en Ilopango, financiado por Cruz Roja Americana.