Hace 129 años, un 13 de marzo de 1885, el Presidente de la República de El Salvador de aquella época, Dr. Rafael Antonio Zaldívar, a través del Supremo Poder Ejecutivo aprobó la creación de Cruz Roja Salvadoreña, nombrando a Don Augusto Bouineau como primer Presidente del Consejo Superior de la misma. Luego de su aprobación a nivel nacional, el 2 de abril de 1885 la Cruz Roja Salvadoreña se enfrenta a su primer compromiso, tendiendo a los heridos de la famosa batalla de Chalchuapa, y así sucesivamente inicia sus labores humanitarias resguardando la vida de los más vulnerables. La constante lucha humanitaria por auxiliar a los más necesitados se volvió una realidad existente hasta la fecha. Siendo reconocida el 25 de abril de 1925 por el Comité Internacional de la Cruz Roja, fecha en la cual se integra a formar parte del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y Media Luna Roja. Y dos meses después de la Federación Internacional, reconociéndola un 24 de junio del mismo año. Después del constante y arduo trabajo durante 129 años, Cruz Roja Salvadoreña llega a ser la entidad de socorro más representativa a nivel nacional gracias a los Cuerpos Filiales que la integran, como el Comité de Damas Voluntarias, quienes se caracterizan por el amor y compromiso de servir; encargadas de asistir socialmente en asilos, guarderías y orfanatos, entregando ropa, alimentos y medicinas a los más necesitados. Asimismo, es integrada por Cruz Roja de la Juventud, filial que se destaca por su visión de adoptar un papel preventivo, consciente que la educación es básica para la integración en actividades sanas que orienten su accionar en la transformación de la mentalidad de la comunidad, en este cuerpo se forjan jóvenes que serán quienes constituyan en el futuro a los otros Cuerpos Filiales realizando tareas de socorro y primeros auxilios en caso de desastre o emergencia. Además, cuenta con el Cuerpo de Guardavidas Voluntarios quienes están listos con la prevención y seguridad acuática ya sea en mares, ríos, lagos y piscinas. Estos operan especialmente en situaciones de inundaciones y desborde de ríos; así como en temporadas de verano, períodos festivos, excusiones o vacaciones. Disponen dentro de sus especialidades con Buceo y Embarcación. Otra de sus Filiales es Socorristas Voluntarios que son la fuerza de trabajo operativo constante de Cruz Roja Salvadoreña, en la atención pre-hospitalaria y en casos de desastres; quienes además cuentan con la Unidad de Rescate, equipo especializado en esta área. Y actualmente también se cuenta con los Voluntarios Sociales, quienes apoyan en diferentes áreas dentro de la Institución, destacándose entre ellas jornadas médicas, de salud, agua y saneamiento, entre otras. De esta manera Cruz Roja Salvadoreña en cooperación de sus Cuerpos Filiales hacen valer sus 7 principios fundamentales: Humanidad, Imparcialidad, Neutralidad, Independencia, Voluntariado, Unidad, y Universalidad; que garantizan la continuidad del Movimiento de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja con su labor humanitaria de solventar las necesidades de las personas más vulnerables.